domingo, 8 de noviembre de 2009

Un año más

Dentro de unos días cumpliré un año más de vida, y me pregunto: ¿porqué las personas nos despertamos tan sensibles ese día?

Tuve varios cumpleaños increíbles, el primero: mi primer año de vida; mi madre y mis abuelas se "rajaron", yo no lo recuerdo, pero las fotos lo testifican, habían muchas tortas, mucho cotillón de muy buen gusto, muchos niños (que por cierto ahora ya son casi abuelos je je), y yo estaba con un traje de marinero (quién iba a penar que dentro de 17 años sería marinero de la Fuerza Naval Boliviana, je je cosas de la vida).

Esas fotos que poco a poco van perdiendo el color por la humedad de Santa Cruz y el paso del tiempo irradian mucha energía, y es esa energía que me hace pensar que fue una fiesta muy especial.

Otro cumpleaños interesante (esta vez sí lo recuerdo)fue en Buenos Aires, mi madre invitó a mis compañeros de el 2do grado del colegio Juna B. Peña, y también invitó a una Maga, que hacía muchos trucos super interesantes, el que más me llamó la atención fue un truco que nos hacía vomitar una bolita blanca, quede alucinando!!.
Mi madre me regaló en bombero de playmobil, fabricado por antex, mis amigos me regalaron un playmobil indio y una losión "Paco", pero el regalo de mi madre no fue sorpresa, yo elegí en regalo en una hermosa juguetería en el centro de Buenos Aires.
Mi tía me regalo la moto "Galgo Formula 1" y la maga trajo un proyector de cine y vimos dibujos animados de Disney.
Yo siempre fui un niño difícil para mis padres, cuando vivíamos en Santa Cruz les hacía la vida imposible con mis exigencias, siempre quería cosas que estaban fuera de nuestras posibilidades, como el Tren de playmobil, una cámara filmadora, el barco pirata, o un auto a radio control de Tyco. Es por eso que como niño chupa sangre siempre el día de mi aniversario terminaba con sabor a poco, es que como niño exprimidor de padres, nunca estaba conforme y no valoraba lo más importante: que siempre estaba con mis padres, hermanos y primos en una fiesta en donde no faltaba nada; pero así era, siempre insatisfecho.
Luego los cumpleaños poco a poco pasaron más desapercibidos para mí, nunca para mis padres, pero aún hay un par más de cumpleaños interesantes: En el servicio militar y uno en el camping Playa Sol.
En el servicio militar entre los miembros de una compañía se forman lazos bastante interesantes, el hecho de estar cagados y por ende bajo las mismas condiciones hace que tu camarada sea una parte importante de ti. No es como en la escuela, o la universidad que los compañeros de curso que no pertenecen a tu grupo son uno más del montón.
Mis camaradas me felicitaron con todo el orden que exige el entrenamiento militar, mis superiores también y me montaron sobre una colcha y empezaron a lanzarme hacia el cielo, al principio sentí miedo y desconfianza, porque en cada bote veía a los camaradas más pequeños y temía por mi vida, pero luego me dejé llevar por el momento y me contagié de la euforia, los disfruté mucho, cuando estaba en el aire a 7 metros de altura simplemente sentí felicidad.
Luego me dieron el día de “franco” y honestamente no recuerdo que hice en casa, cumplía 18, supuestamente a partir de ese día tenía todos los derechos y obligaciones de una persona adulta, pero era más niño como mi hermano menor.
En esas fechas tenía un montón de cosas metidas por la cabeza: la fiesta de promoción, el trato de empatar con Milenka para que los 2 seamos los mejores alumnos, ¿qué demonios iba hacer de mi vida luego?, y combatir la tristeza de dejar el cole y la premilitar.
Y justamente por esas fechas tenía el acto y la fiesta de graduación, estaba muy desolado porque todo lo que había sido y hecho, se iba a terminar en el trascurso de los días. Mi vida era el colegio y no me imaginaba la vida sin el, sin embargo aún sigo vivo je je.
Luego en la universidad las fiestas y las juergas fueron tantas y de tantos colores y sabores que el festejo de mi cumpleaños pasó desapercibido. En último año de la universidad festejábamos de todo y nada, porque es la lectura del borrador de la tesis, porque es nuestro último bautizo, porque es la ultima farra de septiembre, porque nos aprobaron los perfiles de tesis etc, etc.
De nuevo en la universidad, y esta vez en el viejo continente, los festejos por mi aniversario han sido mínimos y sin mucho sazón, ¿será porque estamos viejos ya?, ¿será porque los disparates que antes eran hazañas ya nos aburren? o, simplemente porque ya no tenemos el quórum para hacerlo?, no lo sé, creo que la respuesta más adecuada es porque la responsabilidad y la madurez(que imponen el sistema capitalista plástico) atenúan bastante el instinto autodestructivo y reconstructivo de la juerga.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Notas basura de un jueves de otoño

A partir de hoy documentaré las tonteras que pasan por mi cabeza con el fin de crear un punto de fuga, compartir y pasar el momento.

Para variar hoy el tren falló y perdí 60 minutos de mi vida mirando hacia la vía, esperando y esperando, la gente toda agobiada hacía lo mismo, fumando, con los audífonos y con todo el peso de una jornada de trabajo.

Yo un poco bajoneado por el examen que dí, e intentado auto convencerme: "Leo una de 5 no está mal ya que trabajas de lunes a viernes y debes velar hasta por el papel higiénico del cuarto de baño".

Sin embargo dentro de mí sé que pude haber dado un buen examen, luego trato de auto convencerme: "Leo una de 5 no está mal ya que trabajas de lunes a viernes y debes velar hasta por el papel higiénico del cuarto de baño".

Y así un bucle infinito, gracias a la aleatoriedad de renfe, el tren produjo una interrupción en el bucle y puede cambiar de disco.

Me puse a pensar en los "cue tones", aquellas señales que se escuchan en los sistemas de CATV, y en su traducción al castellano, ¿señales de indicación?, tambiém en la manera que los medios presentan las noticias, y en que odio a los gatos.

No me gustan los gatos porque tienen un aire de distisión, y siempre guardan la compostura, y los envidio.

Hablado de gatos, je je, recuerdo que una vez teñí a un gato de color rojo, je je, y estuvo semanas de color rosado.

Estos párrafos son lo más cutre que he leído en mi vida, pero es lo que pasa por mi cabeza, y quiero plasmarlos así me doy vergüenza de mí y evito pensarlos.

En el trayecto a casa estuve pensando en la web de la EMI y en mi humilde opinión es una reverenda vergüenza, enlaceps rotos, información caduca, la web no tiene un estilo definido, las fotos parecen hechas por la abuela de un suboficial y el webmaster no tiene ni la menor idea de los ordenes de magnitud, con la triste conexión de Internet que hay en Bolivia se da el lujo de publicar fotos que pesan más que mi gordo trasero digitalizado.

Un sitio web ya no es una tarjeta de presentación ni un folleto digital, la web es un conjunto de aplicaciones que acercan los servicios de una intuición a sus miembros y a la comunidad en general, es un medio universal, la intuitividad y sencillez son críticos.

Cuando llegué a mi pueblo, lo único que quería era llegar a mi cama, cuando por fin estaba a punto de hacer un reset viendo una peli pirata en maganosequé el bendito letrero de los 72 minutos vaya mie@|#|@!!

Entonces para distraerme abrí este blog.